miércoles, 23 de abril de 2025

Emergence

¡Lo confieso, soy el culpable o la víctima, juzgué usted!
Estoicamente, aguante el roce de tu piel, las sonrisas cómplices, tu perfume atrapándome y guiándome a ti.
Juro, por Dios, que muchas veces cerré los ojos al oír tu voz. Que traté de apartar la vista cuando tu difusa imagen aparecía frente a mí. 
No sé qué escribo, estoy ebrio de ti. 
El influjo vampírico sonó, haciendo eco en esas cuatro muy endebles paredes. El motor andando. Tu rostro, esa amplia sonrisa que solo era para mí.
¿Lo confieso, soy el culpable o la víctima? Júzgame tú.
Pero la deseaba. Realmente la deseaba. Apagué el cerebro, no importó consecuencia alguna. Ni la hora, ni el lugar. Solo apunté el arco y la flecha a la diana que encausaba mi felicidad.
Besé sus labios
Los besé con desesperación, con tristeza y alegría, los besé como quien idolatra a un objeto valioso. Como quien obtiene algo que cambiará su vida para siempre. Así besé sus labios, cerrando los ojos y sonriendo por dentro.
Una chispa, una que desencadena una llama, un incendio, un planeta sumido en fuego, una estrella, un sol que da cabida a su pecho para que vivas en él. 
¡Oh diosa del fuego!!! ¡Por favor, termina de incinerar mi alma o hazme cenizas!!!
¡Maldición!, ¿cómo interpreto todo esto?!
Transportados al silencio, a la oscuridad, al eco metálico. Ahí sucedió este crimen de guerra.
Donde busqué tu sonrisa en la penumbra y solo encauce mis labios a los tuyos. Rápido y sagaz. No quise explicación; solo besar y correr.
Más cuando me alejaba y vi tu mirada perdida al cielo. Esa sonrisa amplia; simplemente regresé y toqué el cielo con la yema de mis dedos. En ese momento volví a sentirte, volví a contemplar tu misticismo en la oscuridad, volví a guiarme solo por el sonido de tu voz y  el aroma de tu piel.
En ese momento, después de tantas noches, después de tantas lágrimas, después de tantas maldiciones, volví a respirar del aire de tus labios. Volví a llenar mi alma del aliento de vida que desprendes mi diosa en llamas. Volví a decir: ¡Perfecta! ¡Eres perfecta a mis ojos!

Me siento tan neófito en este momento, pero la hiel que se acumula en mi cerebro, no me permite transitar esta senda en paz; tengo que idealizarte, tengo que engrandecerte, tengo una vez más que HACERTE INMORTAL en mis letras. Porque quiero que vivas para siempre en mí.
Quiero esa sonrisa cada día, quiero esas miradas cómplices que te roban el aliento. Quiero simplemente desvelarme por las noches, mientras te veo dormir a mi lado. Y aunque no me lo pidas, cuidar de ti.
Como quien cuida un tesoro, un objeto valioso, una esperanza de vida. La última frontera del corazón.
Quiero honrar el pacto. Que el demonio, el arlequín sin nombre, la máscara de mil caras y el dragón: detengan su maquinaria, detengan su andar... 

Y CONJUREN, TU NOMBRE INMORTAL.,,







2 comentarios:

  1. Lo dejaré aquí para recordarlo.
    Y ahora, abandonaré este templo en ruinas.

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  2. This time Im mistaken
    For handing u a heart worth breaking

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