Hace siglos una madre de negra melena y cálida piel, pidió a al padre Sol de sus virtudes para concebir un linaje del cual pudiese rendirle honores. el Sol; orgulloso y sagaz ayudo a dicha mujer a cambio de que sus virtudes fuesen solo para él. La mujer desamparada en sus plegarias opto por acoger dicho dictamen y ayudado por sus rayos de luz, engendro una hermosa criatura; fuerte y decidida a nacer.
Los meses transcurrieron con celeridad; dicha criatura era mas que un presagio de bienaventuranzas y bendiciones para la mujer que ya nunca estaría mas sola.
Hasta que un fatídico día el Sol no decidió brillar; escondido tras los astros menores este decidió dormir, olvidando por completo a la mujer y a la criatura próxima en nacer. Todo en ese momento cambio. un gesto de egoísmo acabo por malograr una existencia pura; destruyendo consigo toda la fe que una mujer pudiese tener. La madre desamparada grito a los cielos tomando en sus brazos al cuerpo inerte de la criatura ( una niña ) y suplicando piedad alzo la voz al durmiente Astro; el cual, no escucho.
La Luna a ver dicho apto se acerco rauda a la mujer y su hija. Rozando con sus manos de estrellas la cabeza de la pequeña criatura dijo:"Perdonad a quien no tiene corazón puesto el veneno nunca a sido placer de dioses y dejad de llorar por engaños y traiciones y llorad por vuestra hija que ahora yase en este lugar" La madre al oír dichas palabras caio en llantos, su alma se partió en mil pedazos y pidió a la Luna una nueva oportunidad; daria la que fuese por recobrar a su pequeña hija. La Luna triste giro su rostro y dijo en un susurro que corto el viento :"Vida... por vida".
La madre sabia lo que significaba. Y consiente de toda consecuencia; beso la frente de su pequeña hija y cerro los ojos para no abrirlos mas. La Luna lloro mil años esta acción... dicen sus amantes que aun sigue llorando hasta este día. Más cuando recogió entre sus brazos a su pequeña hija ahora; beso su frente y entrego la vida que su madre había sedido en un acto de amor.
Nue fue bautizada bajo las estrellas y criada entre astros. noche a noche aprendió a amar el silencio inmortal que se generaba cuando su alma volaba entre los recónditos vergeles del ancho mundo; el cual es suyo.
No muchos conocen esta historia pues es solo para locos; pues bien sabemos nosotros que cada estrella fugaz es la luna llorando por el gesto de amor. y cada eclipse es Nue abrazando a su madre.
Se cuenta con esto la leyenda; de que noche a noche esta joven de cálida piel y blanca melena baja a los paramos de Tera y a pies descalzos cuan ninfa fuese, se dedica a cantar a su madre los sonetos inmortales que curan y bendicen el alma. Por los siglos; de los siglos.
En dedicatoria a Psique, Nue Psique
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