martes, 23 de septiembre de 2014

Venus en papel



Una musa… solo una… para poder recorrer su cuerpo con la yema de mis dedos, mientras susurro a su oído prosas de amor, mientras callo sus gemidos con mi boca y dejo con mis manos hagan de las suyas sin contenerse; que con solo la punta de mi lengua hacer mío cada centímetro de su piel cada confín de su cuerpo. Tengo ganas de ti; ganas de hacer que cierres los ojos y tu movimiento hipnótico de cadera sea el dueto perfecto a la mía. Tengo deseos de ti, de tu libido, de tu lujuria, del sudor de tu espalda, del calor de tus manos, de tus pechos moviéndose de arriba abajo en cada golpe de mi sexo al tuyo. Sí, tengo ese enfermo enfermo deseo de recorrer tus piernas, rozándolas con la comisura de mis labios, de erizar cada bello de tu cuerpo, mientras acerco mi boca a tu sexo y usando mi lengua comienzo a masajear lentamente tu clítoris, moviéndolo poco a poco, cogiéndolo entre mis labios y apretándole muy despacio, mientras lo mojo completo; solo para sentir como estremezco tu cuerpo. Si; es un enfermizo deseo, el de oírte gemir, y callar tu boca tapándola con uno de mis dedos, quiero probar todo de ti; hacer mío cada rincón de tu cuerpo. Si es mi pensamiento original, el de corromper tus instintos y llevar a cabo los míos, el de hacer detonar tus emociones. El calor de tu sexo y tus piernas mojadas, sinfonía perfecta para mis dedos. Tomo tu nuca con mis manos y alineo tu sexo al mío; solo para poder gozar de tu desesperación, de tus ganas de que te penetre; no te daré todo tan fácil, quiero que grites de deseo, que quieres sentirme, que quieres gozarme, que quieres que mi pene atraviese tus mojadas paredes y te haga mía en cada movimiento, quiero que sientas el placer de ser amada como solo un poeta y un pintor podrían hacerlo.
 Deseo, deseo, deseo… sinfonías del inccubo. Placer de Dioses. Rito pagano e inmortal. Prosa al viento y calor mutuo. Enajenación del alma y al mismo tiempo lo es TODO… y  es NADA.

2 comentarios:

  1. El pintor y su pincel que esparce deseos utopicos en una tela que pareciendo papel deja caer la pintura sin poder absorverla, remueve el ceso y afloja el llanto para cuando cae despierto mata el alma de un golpe por solo haber usado un boligrafo a mina que se borra con una gota de agua.

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    1. El pinto y su Pincel.
      como el Diablo y su Condena.

      Deseos... Deseos....

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